Son muchos los métodos para pavimentar que existen actualmente en el mercado. De hecho, la pavimentación de suelos ha evolucionado a niveles más altos. El microcemento alisado, por ejemplo, es uno de ellos; el cual se ha hecho conocido, ya que ofrece más ventajas que otras alternativas para pavimentar o revestir superficies.
Este es un material parecido al cemento que puede ser pigmentado. Consiste en resinas y cemento, entre otros materiales. Una de sus características más notable es lo reducido de su espesor, aproximadamente 2 a 3 mm. Esto implica una excelente variación con respecto al espesor de 5 cm que puede tener una losa de hormigón sin contar con el espesor de su base.
El microcemento alisado se aplica sobre prácticamente cualquier superficie y, lo mejor de todo es que no hay necesidad de eliminar el material que se utilizó previamente para pavimentar.
Esto es extremadamente crucial, ya que no produce escombros. Tampoco debes emplear mano de obra para descombrar y botar el material. Por otro lado, este es un suelo que se coloca rápidamente.
En definitiva, podemos decir que el microcemento alisado es, en principio, una opción mejorada del cemento alisado, pero con una enorme diferencia estética.
El microcemento funciona perfectamente para ser utilizado en patios, paredes, encimeras, escalones, cocinas, baños y superficies de pisos o paredes sin tener que levantar o eliminar cerámicas y azulejos del piso, etc.
Además, tiene una amplia gama de colores, puede ser usado tanto en interiores como en exteriores y no necesita juntas de expansión o dilatación, porque no se rompe como el cemento alisado.
Por otro lado, su mantenimiento es muy fácil, sólo hay que usar un trapeador para dejarlo muy limpio.
Entre las características y ventajas del microcemento alisado, tenemos:
El último precio del microcemento depende de muchos aspectos. Simplemente no es un producto sencillo de usar, porque exige una mano de obra con experiencia.
Por otro lado, la calidad de los materiales utilizados tiene mucho que ver con el aumento o la reducción del precio del microcemento. Por ejemplo, cuando los suministros son de mala calidad, su proyecto podría sufrir de un posible agrietamiento sobre su superficie.
Pero, básicamente, los precios del microcemento pueden oscilar entre 40 y 60 euros por metro cuadrado (m2). Incluso, en función de las necesidades del cliente, pueden variar de 59 a 100 euros por metro cuadrado.
Como hemos dicho anteriormente, hay ciertos aspectos que pueden hacer variar su precio final. A veces es difícil trabajar, por ejemplo, lugares en los que existen muchos recovecos o detalles en la estructura. Por ejemplo, las escaleras o los cuartos de baño.
Tanto si el trabajo se realiza dentro o fuera de su casa o negocio, el coste final puede variar mucho. Pero teniendo en cuenta que el piso actual nunca será demolido durante su ejecución es probable que no se genere escombros que botar. Tampoco se requiere encofrar. Esto se traduce en un gran ahorro de tiempo y, por esa razón, puede hacer del microcemento un material significativamente menos costoso.
Simplemente, cuando el microcemento es comparado con otros métodos en los que debemos eliminar la base existente, ya sea hormigón, baldosas, etc., tendríamos que considerar los gastos que implica esta partida en el presupuesto.
Otra cosa para considerar es el hecho de que cuanto más metros cuadrados tengamos que cubrir, menos caro puede ser el microcemento o viceversa. Así como una pequeña área puede salir más económica, también cubrir grandes superficies puede hacer que el precio final sea más cómodo, a razón de un descuento significativo por metros cuadrados.
Además, recuerde que no es exactamente lo mismo proteger una superficie uniforme, sin desafíos, que un área donde tenemos muchos bordes o cambios de nivel, como es el caso de las escaleras.
En fin, el precio regular en m2 del microcemento es de alrededor de 40 a 59 euros por m2. Por supuesto, se pueden conseguir precios inferiores a 35 euros, pero recomendamos que nunca acepte tal precio, ya que se considera de dudosa calidad.
Instalar microcemento alisado supone grandes ventajas gracias a sus características y propiedades. El microcemento puede instalarse sobre cualquier superficie firme, que no esté en movimiento, como es el caso de las tarimas.
Pero, por lo general, se puede instalar sobre cemento o morteros de yeso, hasta techos y paredes, pero con la ventaja de que su espesor es muy inferior al de otros revestimientos.
Comencemos a ver las acciones a seguir para su correcta instalación:
Paso 1: Se prepara la base, ya sea nueva o existente, cada una tiene sus requerimientos. La superficie debe estar bien nivelada, limpia y seca. Sin aceite ni polvo. En consecuencia, aspiraremos y limpiaremos a fondo la superficie y lo haremos de nuevo cada vez que apliquemos cada capa de microcemento. Esperamos que se seque, lijamos y aspiramos, limpiamos a fondo la superficie.
IMPORTANTE: Antes de aplicar el microcemento debemos colocar cinta adhesiva en los zócalos de las paredes para evitar que se manche.
El microcemento es muy adhesivo y en el momento en que se seca, será un desafío eliminar cualquier resto dejado sobre él.
Paso 2: A diferencia del cemento alisado para poner el microcemento la parte superior tiene que estar completamente seca y sin polvo ni suciedad. Si la humedad es superior al 5 por ciento, se suele recomendar un acabado antideslizante.
También para prevenir el moho tenemos que sellar completamente la superficie, así evitaremos que la humedad penetre.
Paso 3: Cubrir cada hoyuelo con mortero. Nos aseguraremos de que el área quede uniforme antes de la aplicación del microcemento alisado.
Paso 4: Este es el paso en el que daremos imprimación y dejaremos que se seque.
Paso 6: Ponemos la malla de fibra de vidrio en todo el espacio a revestir para aplicar la capa inicial. Dejamos que se seque y luego lo lijamos.
Paso 7: Usamos el color deseado, lo vamos a hacer mezclando los pigmentos con todo el microcemento. La aplicación se llevará a cabo en una segunda capa. El pigmento se dosifica en agua potable amasada y se dispersa con un agitador.
Paso 8: Sellar y pintar la parte superior. Usamos una capa de sellado de poliuretano.
NOTA: esta última capa es importante, ya que cubrirá los poros del microcemento, protegiendo así nuestro suelo de manchas.
El grosor o espesor del microcemento es extremadamente pequeño, de 2 a 3 mm. Esto puede ser una gran ventaja, debido al hecho de que, a pesar de su grosor diminuto, este puede soportar fuertes impactos gracias a que su superficie es altamente resistente.
Además, dado que no es necesario eliminar la base antigua para utilizar este material, se ahorra dinero. El material que se desea sustituir puede usarse como base para el microcemento sin problemas, hasta que se obtenga una capa de entre 2 y 3 mm de peralte.
Un error sería pensar que una vez aplicado el microcemento alisado la superficie se nivelará o aumentará su espesor, la verdad es que este recubrimiento no supera los 4 mm.
La apariencia y la alta calidad del microcemento alisado lo hace el preferido cuando se desea diseñar un ambiente de prestigio, mucho más estético.
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