La pavimentación y todo lo que comprende este proceso, por suerte está lleno de opciones ideales de acuerdo al aspecto estético o arquitectónico que se quiera, pero dentro de todas las alternativas, resalta el hormigón impreso con una amplia aplicación de más de 50 años en Estado Unidos y más de 30 a lo largo de Europa.
Pero no se puede catalogar como una forma más de acabado, ya que usando el hormigón impreso con imitación de madera, siendo un material que proporciona textura, color, y con la plancha de impresión termina siendo indicado para superficies, fachadas y paredes.
La implementación del hormigón impreso, cada día ha ido en aumento, en lugar de la madera, esto se debe en primer lugar, a que es una inversión a corto plazo, ya que con el uso del mismo, se ahorra notablemente al no tener la necesidad de gastar en su mantenimiento, como ocurre con la madera.
Igualmente su uso genera mayor durabilidad y resistencia a cualquier superficie, en caso contrario a la madera, porque tiene mayor nivel de deterioro bajo ciertas circunstancias en contacto con el exterior, y precisamente lo que se busca es realizar una inversión que se pueda mantener a través del tiempo y las condiciones.
A pesar de que muchos puedan preferir a la madera por el efecto visual que causa, esto tampoco es inconveniente al usar el hormigón impreso, ya que, trabajando de la forma correcta, no debe quedar finalmente con la forma de ser hormigón propiamente sino de igualar la sensación de ser madera normal, haciendo imitación de la misma con el acabado.
El hormigón impreso con imitación de madera posee amplia ventajas al elegir su uso, en primer lugar la proporción calidad vs precio, es sumamente armónica, ya que para la durabilidad que ofrece, lo único a tener en cuenta es la mano de obra que requiere pero, en comparación con otros materiales, vale la pena realmente.
Por otro lado, esta elección es muy provechosa a la hora de aplicar diseños capaces de imitar a la madera, porque adquiere la misma apariencia y textura, pero también se puede innovar con piedras naturales a gusto personal, o sea brinda la oportunidad de jugar a combinar como se quiere que luzca, cómo por ejemplo la tonalidad del color madera.
Incluso cuenta con una instalación práctica que no necesita habilitar toda una obra para ello, dependiendo claro de en qué estado de preparación se encuentre el sitio, por ende la contratación tampoco será un tema de preocupación a la hora de elaborar un presupuesto, como resultaría con otro tipo de materiales que si requiere de mayor especialista.
La preparación del hormigón, si se trata de una hormigonera se va vertiendo la mezcla de planche y cemento de fibra de polipropileno, en la dosis recomendada por el fabricante con el que se esté trabajando que haya realizado la evaluación respectiva y adecuada al sitio al cual se va a transformar.
Del mismo modo las fases para la realización de un hormigón impreso, son muy sencillas, en primer lugar se debe tener en cuenta lo anteriormente descrito, que es la preparación del sitio, ya que este debe ser nivelado y encofrado, para de esta forma aplicar la capa de hormigón, con un grosor mínimo de 10 centímetros.
Luego se procede a colocar un alisado sobre la superficie del hormigón que es lo que lo caracteriza como impreso, y así mismo conjuntamente con el color a emplear, para aplicar el respectivo polvo anti pegamiento, para abrir paso a la creación de formas, y así hacer la imprimación de la superficie con la forma seleccionada.
La clave está en extender, reglar, y alisar la superficie con la que se está trabajando, ya que para generar un acabado impreso, se debe espolvorear o pulverizar, y estampar con la pericia de mimar la superficie, suavemente, pisando, con poca presión, en forma hilada siempre en la misma dirección.
Así mismo, la carta de colores disponibles a usar son muy diversos, según el destino final que se le quiera dar, ya que puede ser; negro, pizarra, plata, arcilla, tabaco, marrón, tostado, mostaza, verde, rojo oxido, crema, rojo vino, cuero, amarillo, pardo y corcho, y así mismo pasa con las formas y modelos por lo que es fácil provocar la imitación madera.
Por lo que se puede decir que es una forma de pavimento muy versátil, el cual ha avanzado conforme al tiempo, ya que anteriormente sólo era pavimento y ya, con ese aspecto rústico e informal, pero ahora con tantas innovaciones es posible que también aporte mayor tono estético, por la incorporación de colores y similitud con otros materiales como madera.
El hormigón impreso con imitación de madera es una buena solución, porque es una variación más del tipo de acabado, usando color teka hasta el color pino, y luce un realismo pleno de ser madera, y cualquier decorador recomienda usarlo en sitios expuestos a la luz, o al aire libre, ya que no se va a perder su aspecto integro.
Por ello, representa la opción número uno por su rendimiento y amplia ventaja sobre la propia madera, ya que evita cualquier problema futuro con el crecimiento de yerbas o aparecimiento de moho, así que será una bala esquivada por reducir un problema menos que se pueda generar, y es sumamente tolerante a enfrentarse con agentes atmosféricos sin daños.
La renovación solo bastará con una simple limpieza como cualquier otra superficie, o se puede cambiar el tono, usando un barniz, por lo que no se va a requerir la presencia de algún experto, es rápido y muy armónico visualmente porque es una opción que aporta lujo y confort.
Con tantas ventajas es imposible no catalogarlo como una opción única e innovadora, que ha trascendido por desplazar totalmente a la madera, y dar el salto de calidad con un acabado al pavimento que puede lucir como un detalle estético de alto nivel, siendo que sus fases de elaboración son muy sencillas, es una inversión segura y duradera.
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