¿Cómo hacer el hormigón impreso blanco?

Aunque tenga una composición parecida al hormigón convencional, esta versión con “áridos blancos” conserva una apariencia impecable y llena de luminosidad, que ha sido aprovechada en la renovación de obras antiguas. Acompáñanos a conocer las razones por las que el hormigón impreso blanco se ha convertido en un favorito en el mundo de la construcción.

Además de conservar todas las virtudes del hormigón gris, como su resistencia frente cargas pesadas y la durabilidad que ofrece ante los azotes de la naturaleza y el tiempo, brinda una apariencia mucho más atractiva. De hecho, a pesar de que el hormigón impreso blanco es estéticamente versátil, no requiere de adiciones para que pueda lucir bien.

Por otro lado, reduce de manera natural la temperatura de la habitación, ya que refleja la luz del sol e impide que el calor penetre en el interior de la estructura. Esto implica una menor dependencia de fuentes de ventilación artificial como aires acondicionados y ventiladores, por lo que es más amigable con la naturaleza, mientras que también reduce el consumo energético.

Con este en consideración, el hormigón impreso de color blanco supone una inversión que no requerirá de mayores gastos en el futuro relacionados con su mantenimiento, puesto que no necesita de muchos cuidados. A su vez, puede ayudarte a ahorrar durante una renovación al no depender de acabados para destacar.

• Fácil de pigmentar: Contrario a su contraparte de color gris, se trata de un material que dispone de una base neutra que no ofrece mayores complicaciones a la hora de pigmentar con otros colores. Asimismo, también ofrece libertades que abarcan la personalización del acabado.

• Resistencia: La composición del hormigón impreso blanco lo hace un material sumamente resistente. Por esta razón, es capaz es de soportar grandes cargas y resistir el desgaste provocado por la erosión, los rayos solares y los cambios de temperatura. Gracias a esto, lo convierte en una buena opción para caminos, columnas y muros de soporte.

• Estética: Aunque se relaciona perfectamente con otros colores, lo cierto es que su característico color blanco es bastante elegante y hermoso. A causa de esto, se ha implementado en importantes construcciones de estilo vanguardista.

• Acabados: El hormigón impreso color blanco no solo te permite personalizar su color y textura, sino que ofrece una adaptabilidad frente a importante cantidad de acabados.

• Refleja la luz: Una ventaja que se conserva por su original color blanco es la capacidad de reflejar la luz, entre la que se incluye la luz solar. Esto implica una menor absorción del calor y una reducción en el aumento de la temperatura.

Con el fin de que la instalación del hormigón impreso se realice de manera apropiada, existen una serie de pasos básicos que garantizaran un acabado impecable:

1. Despejar: Es vital trabajar en una superficie que limpia que no posea obstáculos ajenos a la construcción. Acto seguido, lleva a cabo un trazado por medio de un encofrado, donde puedes valerte de tapajuntas para puertas o rodapiés, debido a que son ideales para realizar curvas o delimitaciones firmes.

2. Grosor: Determina el grosor de la superficie de hormigón impreso blanco. Ten en cuenta que el mínimo recomendado es de 10 centímetros, aunque dependiendo de si la obra está dirigida al tránsito de persona o vehículos pesados, puede ser de 15 centímetros. Por su parte, para compactar el terreno podemos hacer uso de un rodillo o un pisón. Ahora, en el caso de tener que retirar tierra, esta deberá ser cajeada y compactada. Asimismo, en el caso de tener que rellenar espacios, se puede utilizar una combinación de arena y canto rodado, conocido como planche.

3. Aislamiento: Con el fin de impedir que el terreno transpire, es necesario recubrirlo con un plástico transparente luego de compactar la tierra. Esto evitará que el hormigón impreso blanco obtenga manchas blancas a causa de los sedimentos del terreno.

4. Preparación del hormigón: En el caso de prepararlo por hormigonera, hay que añadir la cantidad adecuada de polipropileno a la mezcla hecha a partir de cemento y planche. También puedes optar por solicitar el hormigón ya preparado de fábrica. Esta alternativa es ideal para espacios muy amplios.

5. Vaciado: Comienza el vaciado continuo del hormigón en la superficie determinada. No olvides colocar la malla a la mitad de la altura del grosor deseado. Puedes abrir el poro del hormigón mientras alisas el material gracias a una llana de magnesio.

6. Pigmentación: Cubre la superficie con el color escogido y déjalo unas dos horas mientras el pigmento se disuelve en la superficie.

7. Acabado impreso: Aplica en la superficie el agente desmontable mientras se da forma al hormigón por medio de los moldes. Esto permitirá que el hormigón se mantenga moldeable.

8. Limpiar: Luego de al menos 3 días, procede a retirar el desmoldante con la ayuda de una hidrolimpiadora.

9. Resina: Con un rodillo o de manera pulverizada, aplica la resina protectora. Este elemento evitará que el hormigón se desgaste a causa del sol.

Hay que tener en cuenta que el valor puede variar dependiendo de la ubicación, la superficie abarcada y el grosor de la misma, así como la disponibilidad del hormigón impreso de color blanco o las características específicas de la obra. Sin embargo, el costo usualmente ronda entre los 14 y 30 euros por metro cuadrado.

A pesar de tratarse de un material que no todos logran aplicar correctamente, gracias a que ofrece resultados impresionantes se ha convertido en un favorito para quienes saben de construcción. Veamos algunas de las razones más importantes para hacer del hormigón impreso de color blanco el material ideal para tu proyecto:

• Versatilidad: Es un material que puede encajar con todo tipo de estructuras y estilos, por lo que puede ser una elección segura y atractiva en la mayoría de los casos.

• Bajo costo: No solo ofrece un precio de construcción bastante competitivo en el mercado, sino que, además, implica un ahorro a largo plazo.

• Estilo: Sin dudas, el color del hormigón impreso blanco trae múltiples beneficios prácticos, siendo la elegancia una garantía ofrecida a cualquier construcción.